Junior alcanzó, por tercer año consecutivo, la final de la Copa Aguila, derrotando un gol por cero a Patriotas de Boyacá en el Estadio Roberto Melendez de Barranquilla. En un partido en que el elenco rojiblanco dominó futbolisticamente a su rival, quedó la sensacion que el marcador fue muy corto, dejando abierta la serie hasta el ultimo minuto del partido, ya que ante cualquier error defensivo o alguna jugada aislada se podia igualar la serie para decidirla desde el punto penal.
Para el juego, el tecnico Julio Comesaña utilizó sus mejores hombres (como debia ser), para buscar acceder a la primera final del semestre. No importó que Teofilo Gutierrez y Yimmy Chará acabaran de desembarcarse de Lima, para que ambos fueran alineados desde el primer minuto, hasta el pitazo final. Precisamente la jugada del gol fue una genialidad entre los dos jugadores de selección, quienes luego de una pared habilitaron a Roberto Ovelar para que anotara el unico gol del partido. En ese momento Junior estaba volcado sobre el arco Boyacense, y de no haber sido por la mala definicion de Teofilo en el minuto 7, el marcador ya estuviese iluminado a favor de lo tiburones.
Luego del gol el partido no cambió, Junior se mantuvo intentando ampliar la diferencia (aunque a media maquina), y el objetivo no se conseguiría, prolongando hasta el pitazo final la certificacion del paso a la final. Patriotas por su lado mostró muy poco, Sebastian Viera fue un espectador de lujo que solo fue exigido al final del partido con algunos remates de larga distancia. El equipo boyacense quedó expuesto en el gramado del Metropolitano, donde incluso se puso en duda como pudo acceder a estas instancias definitivas del torneo con tan pobre nivel mostrado.
A partir de este momento Junior enfrentará una seguidilla de partidos, salvo aplazamientos por el tema aereo en Colombia, en la que se jugará la clasificacion anticipada a las finales del campeonato local, la final de la Copa Aguila, que da paso directo a la Copa Libertadores del proximo año, y los cuartos de final de Copa Sudamericana. Por lo anterior el equipo y el DT deben manejar de forma inteligente las rotaciones en su nomina, ya que no hay excusas para no alcanzar estos objetivos trazados. Por lo pronto el sendero andado ha ido bien y Barranquilla esta feliz con su Junior, pero la evaluacion del camino solo se puede hacer al final cuando se evaluen los objetivos alcanzados.
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